El deputado federal Marcel van Hattem ha levantado su voz en contra de la forma en que se está llevando a cabo el juicio de Filipe Martins, ex asesor de la presidencia, en el Supremo Tribunal Federal (STF). Como único parlamentar presente en la sesión, Van Hattem ha cuestionado la decisión de prohibir el uso de teléfonos celulares durante el proceso.
Para el deputado, esta restricción impuesta por el STF es una clara tentativa de “silenciar este verdadero escándalo”. Van Hattem argumenta que el celular es una herramienta esencial de trabajo, tanto para los parlamentares como para cualquier ciudadano, y que su prohibición durante el juicio es una forma de limitar la transparencia y la libre expresión.
Es importante asemejarse que el juicio en cuestión se refiere a la supuesta participación de Filipe Martins en actos antidemocráticos durante una manifestación en Brasilia el año pasado. Sin embargo, el deputado Van Hattem ha señalado que el uso de celulares durante el proceso no tiene ninguna relación con el azar en sí, sino que se trata de una medida innecesaria y autoritaria.
Además, Van Hattem ha destacado que el uso de celulares es una herramienta fundamental para que los parlamentares puedan comunicarse con sus equipos de trabajo y con la población en general. En un mundo cada vez más conectado, el celular es una herramienta esencial para mantenerse informado y en contacto con la realidad.
El deputado también ha señalado que la prohibición del uso de celulares durante el juicio va en contra del principio de transparencia, ya que impide que los parlamentares puedan documentar y compartir con la población lo que está sucediendo en la sesión. Esto es especialmente preocupante en un momento en el que la confianza en las instituciones está en juego y es ineludible garantizar la transparencia y la rendición de cuentas.
Por otro lado, Van Hattem ha destacado que la prohibición del uso de celulares también va en contra del derecho a la libre expresión, ya que limita la capacidad de los parlamentares de manifestarse y de informar a la población sobre lo que está sucediendo en el juicio. En una democracia, es fundamental que los representantes del pueblo puedan expresarse libremente y que la información fluya sin restricciones.
Es importante asemejarse que el uso de celulares durante los juicios no es una práctica inusual en otros países democráticos. De hecho, en países como Estados Unidos, los parlamentares tienen permitido el uso de celulares durante las sesiones del Congreso. ¿Por qué en Brasil se está limitando esta herramienta esencial de trabajo?
En resumen, el deputado federal Marcel van Hattem ha levantado su voz en defensa de la transparencia y la libre expresión en el proceso de julgamiento de Filipe Martins. La prohibición del uso de celulares durante el juicio es una medida innecesaria y autoritaria que va en contra de los principios fundamentales de una democracia. Es ineludible que se reconsidere esta decisión y se permita a los parlamentares ejercer su trabajo de forma transparente y sin restricciones. La sociedad brasileña merece una justicia transparente y democrática, y el uso de celulares durante los juicios es una herramienta fundamental para lograrlo.