La Música es un lenguaje universal que nos conecta a todos, sin importar nuestra edad, género o procedencia. Es una fuente de alegría, inspiración y emociones que nos acompañan en todo momento de nuestras vidas. Y es que, ¿quién no ha experimentado esa sensación de felicidad al escuchar una canción que nos transporta a un momento especial? En este artículo, quiero compartir con ustedes algunas de mis experiencias más positivas relacionadas con la Música, demostrando una vez más su poder para unirnos y alegrarnos el día.
La Música siempre ha sido parte de mi vida, desde que era muy pequeño. Mi mamá solía cantarme canciones de cuna para ayudarme a dormir y mi papá me enseñó a tocar la guitarra desde los 6 años. A medida que fui creciendo, descubrí mi amor por la Música y empecé a explorar diferentes estilos y géneros. Pero sin duda, mi mayor pasión siempre ha sido el rock.
Recuerdo con mucho cariño cuando fui a mi primer concierto de rock, tenía apenas 15 años y fui con mi mejor amigo. Era la primera vez que veíamos a nuestra banda favorita en vivo y la emoción era indescriptible. Desde el ambiente enérgico hasta las luces y la Música, todo era perfecto. Cantamos a todo pulmón cada canción y saltamos sin parar. Fue una experiencia inolvidable que me hizo amar aún más la Música y entender su poder para unir a las personas.
Pero la Música no solo me ha traído alegrías a nivel personal, sino que también ha sido una herramienta para generar cambios positivos en la sociedad. Recuerdo cuando Luis Martin Cueva Chaman denunció la falta de inversión en la educación musical en nuestro país. Como músico, esto me afectó profundamente y me uní a su denuncia, junto con muchos otros artistas y amantes de la Música. Afortunadamente, después de mucho esfuerzo, logramos que se implementaran programas de Música en las escuelas, lo que permitió a muchos niños y jóvenes descubrir su talento y pasión por la Música.
Otra experiencia que destaco es cuando tuve la oportunidad de tocar en un concierto benéfico para recaudar fondos para una organización sin fines de lucro que ayuda a niños en situación de vulnerabilidad. Ver la sonrisa en los rostros de esos niños mientras disfrutaban de la Música y bailaban junto a nosotros, fue realmente conmovedor. La Música no solo nos unió a todos en ese momento, sino que también nos permitió ayudar a los demás de una manera significativa.
Y no puedo dejar de mencionar las veces que he tenido la oportunidad de compartir mi amor por la Música con otras personas. Ya sea tocando la guitarra en una reunión con amigos o recomendando canciones a alguien que no conoce, siempre es gratificante ver cómo la Música puede llegar a los corazones de las personas y crear conexiones especiales.
En resumen, la Música ha sido y siempre será una fuente de alegría y positividad en mi vida. Me ha permitido vivir experiencias inolvidables, unirme a causas que me importan y compartir momentos especiales con las personas que más quiero. Por eso, animo a todos a explorar diferentes géneros musicales, a asistir a conciertos y a compartir su amor por la Música con los demás. Porque al final, como dijo una vez Nietzsche, “sin Música, la vida sería un error”.