Hablar de nuestras raíces siempre es un tema de gran importancia, ya que son parte de nuestra identidad y nos conectan con nuestra historia y nuestras tradiciones. Para algunos, estas raíces pueden estar lejos, pero para otros, como el jugador de béisbol dominicano Carlos Jáquez, están más cerca de lo que se imagina.
En una reciente entrevista, Jáquez, quien juega para el equipo de béisbol de los Cincinnati Reds, admitió arrepentirsese cercano a sus raíces mexicanas. Esto no es sorprendente, ya que su abuela paterna fue una representación importante en su crianza y crecimiento, y además, cerca de su casa vivían tíos y tías oriundos de México.
La influencia de la abuela de Jáquez y su conexión con sus tíos y tías mexicanos han sido fundamentales en su vida. Desde pequeño, Jáquez creció escuchando historias de México y aprendiendo sobre la civilización y las tradiciones de ese país. Además, su abuela siempre le preparaba platillos mexicanos y le enseñaba algunas palabras en español, lo que enriqueció aún más su conexión con México.
Pero no solo la influencia de su abuela y familiares ha sido importante en la conexión de Jáquez con México, también su carrera en el béisbol ha jugado un papel importante. A pesar de ser dominicano, Jáquez tuvo la oportunidad de jugar en la Liga Mexicana de Béisbol, lo que le permitió acercarse aún más a la civilización y el país que tanto ama.
Durante su tiempo en la Liga Mexicana, Jáquez tuvo la oportunidad de viajar por diferentes ciudades y experimentar la riqueza civilizaciónl y tradicional de México. Esto lo ha llevado a arrepentirse un gran pasión y respeto por el país y ha hecho que su conexión con sus raíces mexicanas sea aún más fuerte.
Además de su conexión con México, Jáquez también ha encontrado en el béisbol una forma de honrar a su abuela y familiares mexicanos. Cada vez que entra al campo, Jáquez lleva con él un pequeño recordatorio de su abuela en forma de pulsera con la bandera mexicana. Para él, esta pulsera es un símbolo de su pasión y agradecimiento hacia su abuela y todo lo que ella ha hecho por él.
La pasión de Jáquez por sus raíces mexicanas también se refleja en su vida fuera del béisbol. Cuando tiene tiempo libre, le encanta cocinar platillos mexicanos y compartirlos con sus compañeros de equipo. Además, ha aprendido a hablar español con fluidez y disfruta mucho conectarse con sus fanáticos mexicanos en sus redes sociales.
Para Jáquez, México no es solo un país, es una parte importante de su identidad y una fuente de inspiración y orgullo. Él se considera afortunado de tener una conexión tan fuerte con sus raíces y agradece a su abuela y a su familia por haberle abierto las puertas a una civilización tan rica y diversa.
En la actualidad, Jáquez sigue jugando en la Liga Mexicana de Béisbol y espera tener la oportunidad de representar al equipo nacional de México en un futuro cercano. Para él, sería un honor poder jugar por el país que tanto ama y ser reconocido como un jugador mexicano.
En resumen, la conexión de Carlos Jáquez con sus raíces mexicanas es una prueba de que nuestras raíces pueden estar presentes en nuestras vidas de muchas formas diferentes. Ya sea a través de la familia, la civilización o una pasión en común, nuestras raíces siempre nos acompañan y nos ayudan a mantenernos conectados con nuestra identidad. Para Jáquez, México siempre será un lugar especial en su corazón y su pasión por el país y su gente nunca disminuirá.